Todas las personas grandes han sido niños alguna vez...
Desde hace mucho tiempo, El Principito ha sido mi libro favorito por muchos motivos. Uno de ellos es que siempre que lo leo me cautiva de maneras distintas, como si el libro tuviera vida propia y me conociera tan bien que despierta dentro de mí todo aquello que ni yo mismo sé explicarme.
Por último mencionaré al Principito como tal, pero quiero empezar diciendo que desde que tengo un Principito en casa, el libro trascendió exponencialmente su valor para mí. Ahora lo entiendo todavía menos, pero lo amo más.
El principito ha sido mi compañero durante la niñez, la adolescencia, la juventud y ahora la vida adulta (y todo lo que eso conlleva). Además, ha sido seguramente de mis mejores maestros de Filosofía en la vida, porque me enseña cómo vivir, cómo afrontar el mundo y sobre todo con qué principios fundar mis convicciones para alcanzar una verdadera trascendencia.
De este modo, he decidido hacer una breve semblanza de lo que considero debería entenderse como una aproximación filosófica y antropológica a la figura de la persona, desde la alegoría del niño, presentada en el Principito.
El libro aborda la figura del narrador como el arquetipo de humano "tradicional" e inacabado. Criterios como la mediocridad, el conformismo y la represión de los ideales son los que caracterizan a la humanidad promedio, esa a la que el autor critica; esa a la que Nietzche, Sartre y muchos otros llaman despectivamente "humanoides", "demasiado humanos" y "humanos masa", entre otros sobrenombres.
Sin embargo El Principito también aborda una serie de "modelos humanos" con cada planeta que visita y que, sin decirlo, le produce poca ilusión y más bien desasosiego y nostalgia de algo mejor. El hombre avaro, el rey de nadie, el farolero, el geógrafo... todos tienen algo en común desde una perspectiva puramente filosófica: todos hacen algo sin razón, sin provecho y sobre todo sin satisfacción trascendental. Considero que esto también simboliza a tantos y tantos seres humanos que pasan por la vida sin una razón ontológica profunda, que les construya y, por tanto, les edifique para llegar a una muerte plena, feliz y de paz.
Por otro lado, la figura que siempre me cautiva (después del Principito por supuesto), es el zorro y la enseñanza de lo esencial. Y seque considero que en este fragmento se plasma toda la tesis ontológica de la obra: lo único que realmente trasciende en la vida humana es aquello que, por su alto nivel de trascendencia, no puede explicarse, no puede valorarse y no puede incluso pronunciarse: "Lo esencial es invisible a los ojos".
Finalmente, la figura del Principito me cautiva porque la he visto en vivo, en muchas ocasiones pero en algunas de manera muy privilegiada. Vi al principito recogiendo basura en el basurero de la Ciudad del Futuro, lo vi caminando horas para llegar a su escuela, lo vi cansado y quemado por el sol luego de un día de trabajo en los semáforos, sonriendo detrás de una lata vacía, sonriendo a pesar de que no hay muchas razones para hacerlo. Que conste que el principito no ha sido en mi vida solo niños que trascienden mi reflexión; también lo han sido hombres y mujeres que, desde su amor a la vida, su valor propio y su gran virtud de admirarse de las cosas más pequeñas, hacen de su vida (y de las de los que alguna vez estuvimos cerca) una mejor página de este gran libro que se llama Historia
Humana.
Termino afirmando que, si todos leyéramos este libro con la intención de aprender de la vida, seríamos mucho mejores como personas, como amigos, familiares y como ciudadanos. Creo que lo esencial (que es invisible a los ojos) es dejar un legado en este mundo, hacer de esta, nuestra tierra, un mejor lugar para vivir para los que estamos y para los que vendrán.
Así que sueño con un mundo de Principitos que, así como el mío, vivan apasionados, despiertos, soñando y actuando, porque la vida solo puede vivirse a fondo así: soñando y actuando.
Por último mencionaré al Principito como tal, pero quiero empezar diciendo que desde que tengo un Principito en casa, el libro trascendió exponencialmente su valor para mí. Ahora lo entiendo todavía menos, pero lo amo más.
El principito ha sido mi compañero durante la niñez, la adolescencia, la juventud y ahora la vida adulta (y todo lo que eso conlleva). Además, ha sido seguramente de mis mejores maestros de Filosofía en la vida, porque me enseña cómo vivir, cómo afrontar el mundo y sobre todo con qué principios fundar mis convicciones para alcanzar una verdadera trascendencia.
El libro aborda la figura del narrador como el arquetipo de humano "tradicional" e inacabado. Criterios como la mediocridad, el conformismo y la represión de los ideales son los que caracterizan a la humanidad promedio, esa a la que el autor critica; esa a la que Nietzche, Sartre y muchos otros llaman despectivamente "humanoides", "demasiado humanos" y "humanos masa", entre otros sobrenombres.
Sin embargo El Principito también aborda una serie de "modelos humanos" con cada planeta que visita y que, sin decirlo, le produce poca ilusión y más bien desasosiego y nostalgia de algo mejor. El hombre avaro, el rey de nadie, el farolero, el geógrafo... todos tienen algo en común desde una perspectiva puramente filosófica: todos hacen algo sin razón, sin provecho y sobre todo sin satisfacción trascendental. Considero que esto también simboliza a tantos y tantos seres humanos que pasan por la vida sin una razón ontológica profunda, que les construya y, por tanto, les edifique para llegar a una muerte plena, feliz y de paz.
Por otro lado, la figura que siempre me cautiva (después del Principito por supuesto), es el zorro y la enseñanza de lo esencial. Y seque considero que en este fragmento se plasma toda la tesis ontológica de la obra: lo único que realmente trasciende en la vida humana es aquello que, por su alto nivel de trascendencia, no puede explicarse, no puede valorarse y no puede incluso pronunciarse: "Lo esencial es invisible a los ojos".
Finalmente, la figura del Principito me cautiva porque la he visto en vivo, en muchas ocasiones pero en algunas de manera muy privilegiada. Vi al principito recogiendo basura en el basurero de la Ciudad del Futuro, lo vi caminando horas para llegar a su escuela, lo vi cansado y quemado por el sol luego de un día de trabajo en los semáforos, sonriendo detrás de una lata vacía, sonriendo a pesar de que no hay muchas razones para hacerlo. Que conste que el principito no ha sido en mi vida solo niños que trascienden mi reflexión; también lo han sido hombres y mujeres que, desde su amor a la vida, su valor propio y su gran virtud de admirarse de las cosas más pequeñas, hacen de su vida (y de las de los que alguna vez estuvimos cerca) una mejor página de este gran libro que se llama Historia
Humana.
Termino afirmando que, si todos leyéramos este libro con la intención de aprender de la vida, seríamos mucho mejores como personas, como amigos, familiares y como ciudadanos. Creo que lo esencial (que es invisible a los ojos) es dejar un legado en este mundo, hacer de esta, nuestra tierra, un mejor lugar para vivir para los que estamos y para los que vendrán.
Así que sueño con un mundo de Principitos que, así como el mío, vivan apasionados, despiertos, soñando y actuando, porque la vida solo puede vivirse a fondo así: soñando y actuando.
Gracias Principito...
Imágenes tomadas de:
https://www.unicef.org/guatemala/movimiento-por-la-infancia
https://www.ellitoral.com/index.php/id_um/233448-el-principito-cumple-77-anos-10-datos-curiosos-sobre-la-historia-y-su-autor-uno-de-los-libros-mas-relevantes-del-siglo-xx-cambalache.html
Comentarios
Hacerse mayor no implica perder la inocencia y el ama de niño, Desgraciadamente es algo que pasa, por la clase de educación y el tipo de sociedad en la cual hemos crecido. El principito nos deja en claro que cumplir años no es un impedimento para seguir teniendo sueños y ambiciones, por muy difícil que esto parezca, El mundo es un gran pario que debemos aprovechar y disfrutar, tampoco debemos perder esa visión que de niños tuvimos, ser niño es bueno, tengas la edad, que tengas.
EL PRINCIPITO – COMENTARIO CRÍTICO
Sentado en una duna de arena, nada se ve, nada se oye y sin embargo, hay algo que resplandece en el silencio…
El punto principal del libro es el representar el lado más humano del hombre, de cómo dejamos que otros nos hagan creer que no podemos ya que ellos han perdido la capacidad de imaginar o soñar, haciendo creer a los demás que ellos también son incapaces de realizar sus sueños.
Se aprende algo nuevo de cada experiencia, de cada persona, en base a su propia vida, para ayudar a transformarnos a algo positivo.
En la visita de cada planeta se aprende algo nuevo a base de las experiencias, caminando en línea recta uno no puede llegar muy lejos, lo que hace mención a la importancia de equivocarse, tomar caminos inesperados y asumir riesgos en el camino de la vida, nos desgastamos en una sola área de nuestras vidas, perdiendo el sentido de esta misma.
Hay que tener sentimientos reales para poder crear vínculos honestos y verdaderos, más no crear dependencia porque así como las cosas vienen y se van, lo único que queda son las experiencias vividas.
Solo con el corazón se puede ver bien, lo esencial es invisible para los ojos.
Yo me pregunto –dijo– si las estrellas están encendidas para que cada cual pueda un día encontrar la suya.
EL PRINCIPITO – COMENTARIO CRÍTICO
Sentado en una duna de arena, nada se ve, nada se oye y sin embargo, hay algo que resplandece en el silencio…
El punto principal del libro es el representar el lado más humano del hombre, de cómo dejamos que otros nos hagan creer que no podemos ya que ellos han perdido la capacidad de imaginar o soñar, haciendo creer a los demás que ellos también son incapaces de realizar sus sueños.
Se aprende algo nuevo de cada experiencia, de cada persona, en base a su propia vida, para ayudar a transformarnos a algo positivo.
En la visita de cada planeta se aprende algo nuevo a base de las experiencias, caminando en línea recta uno no puede llegar muy lejos, lo que hace mención a la importancia de equivocarse, tomar caminos inesperados y asumir riesgos en el camino de la vida, nos desgastamos en una sola área de nuestras vidas, perdiendo el sentido de esta misma.
Hay que tener sentimientos reales para poder crear vínculos honestos y verdaderos, más no crear dependencia porque así como las cosas vienen y se van, lo único que queda son las experiencias vividas.
Solo con el corazón se puede ver bien, lo esencial es invisible para los ojos.
Yo me pregunto –dijo– si las estrellas están encendidas para que cada cual pueda un día encontrar la suya.
EL PRINCIPITO – COMENTARIO CRÍTICO
Sentado en una duna de arena, nada se ve, nada se oye y sin embargo, hay algo que resplandece en el silencio…
El punto principal del libro es el representar el lado más humano del hombre, de cómo dejamos que otros nos hagan creer que no podemos ya que ellos han perdido la capacidad de imaginar o soñar, haciendo creer a los demás que ellos también son incapaces de realizar sus sueños.
Se aprende algo nuevo de cada experiencia, de cada persona, en base a su propia vida, para ayudar a transformarnos a algo positivo.
En la visita de cada planeta se aprende algo nuevo a base de las experiencias, caminando en línea recta uno no puede llegar muy lejos, lo que hace mención a la importancia de equivocarse, tomar caminos inesperados y asumir riesgos en el camino de la vida, nos desgastamos en una sola área de nuestras vidas, perdiendo el sentido de esta misma.
Hay que tener sentimientos reales para poder crear vínculos honestos y verdaderos, más no crear dependencia porque así como las cosas vienen y se van, lo único que queda son las experiencias vividas.
Solo con el corazón se puede ver bien, lo esencial es invisible para los ojos.
Yo me pregunto –dijo– si las estrellas están encendidas para que cada cual pueda un día encontrar la suya.
Sentado en una duna de arena, nada se ve, nada se oye y sin embargo, hay algo que resplandece en el silencio…
El punto principal del libro es el representar el lado más humano del hombre, de cómo dejamos que otros nos hagan creer que no podemos ya que ellos han perdido la capacidad de imaginar o soñar, haciendo creer a los demás que ellos también son incapaces de realizar sus sueños.
Se aprende algo nuevo de cada experiencia, de cada persona, en base a su propia vida, para ayudar a transformarnos a algo positivo.
En la visita de cada planeta se aprende algo nuevo a base de las experiencias, caminando en línea recta uno no puede llegar muy lejos, lo que hace mención a la importancia de equivocarse, tomar caminos inesperados y asumir riesgos en el camino de la vida, nos desgastamos en una sola área de nuestras vidas, perdiendo el sentido de esta misma.
Hay que tener sentimientos reales para poder crear vínculos honestos y verdaderos, más no crear dependencia porque así como las cosas vienen y se van, lo único que queda son las experiencias vividas.
Solo con el corazón se puede ver bien, lo esencial es invisible para los ojos.
Yo me pregunto –dijo– si las estrellas están encendidas para que cada cual pueda un día encontrar la suya.
El narrador nos cuenta una anécdota de su infancia por la que descubrimos que se siente ajeno al mundo de los adultos. De niño el protagonista dibujó una boa con un elefante en su interior, pero las personas mayores de su entorno sólo eran capaces de ver un sombrero al contemplarlo. Con esta anécdota de infancia, el narrador nos expresa que nunca ha conseguido abandonar por completo su niño interior a lo largo de los años y lo incomprensible que le resulta el mundo de los adultos.
Es inevitable que al estar escrita la historia en primera persona e identificar al narrador como el propio Saint-Exupéry la lectura sea más inmersiva. El empleo de la primera persona ayuda también a que los lectores hagamos un ejercicio de regresión a nuestra infancia de la misma forma en que lo hace el piloto de la historia. Nos gustó especialmente que quien más aprende del otro es el propio piloto del principito y no a la inversa. Esta sabiduría del personaje infantil que cambia la escala de valores del narrador es un punto de inflexión muy interesante para el protagonista. Se crea una relación de nuevo, después de años de desconexión, entre el yo adulto y el yo niño del piloto.
Además, la historia está plagada de metáforas que pueden tener varias lecturas, desde un significado intimista hasta una interpretación de corte más histórico y en relación a los acontecimientos de la época en que fue escrito el libro. El texto está plagado de enseñanzas positivas como la amistad, el amor, la entrega, la ayuda. Las relaciones entre los personajes de la novela tienen una intención clara en cada caso. Realmente, en El Principito, todos los personajes cuentan con alguna característica más desarrollada que las demás, lo que les imprime un carácter específico y más adecuado para construir esta historia
Definitivamente, si hay un libro que se debe releer a lo largo de la vida ése es, sin duda, El Principito.
Ya nos habíamos acercado al mundo mágico de Saint-Exupéry hace años, en diversificado para ser exactos, pero hemos extraído conclusiones muy distintas esta vez que volvimos a leer el libro y éso es precisamente lo mágico del libro, que evoluciona de la mano con el propio lector a lo largo de las distintas etapas de la vida, con una lectura completamente distinta.
<> es un libro (bendito libro) que leído de forma adecuada, nos hace entender que, el problema no está en crecer, sino en olvidar. Pero, ¿Olvidar qué?
-Cuando los años van pasando, nos olvidamos que la felicidad está en pequeños momentos, en ese olor de las flores, en las gotas de lluvia que caen, en ese sabor tan agradable al paladar o en ese abrazo que recibimos después de llorar por el raspón de rodillas. Crecemos y creemos que nuestra verdad es la única verdad, que debemos convencer a los demás de tomar el camino adecuado o el que creemos que es el adecuado, ignorando incluso que es lo que nos hace sentirnos plenos. Se nos olvida que el mundo necesita más personas felices que perfectas, inclusive llegamos a olvidar cuando fue la última vez que nos sentimos realmente felices.
Existen momentos que nos centramos tanto en el trabajo, las preocupaciones, las deudas, en reparar aviones, que hacemos a un lado los sentimientos de los demás asegurando que son cosas sin importancia, aunque nadie sea capaz de decir desde cuándo los sentimientos dejaron de tener validez en éste vivir de aparentar y estrés, probablemente porque no hay tiempo para detenernos a analizarlo o para sentir.
Es por eso que creo firmemente que eso <> que es <> es ese mar de emociones y sentimientos que con el tiempo vamos guardando detrás de esa barrera impenetrable, que no nos deja expresar abiertamente lo que sentimos y peor aún, nos hace menospreciar los sentimientos de los demás; porque mientras más mayores seamos, menor importancia prestamos a <>. Por eso confieso que es dichoso aquel que se encuentra a lo largo de la vida, con un principito, sea interno o visto desde el exterior, porque una vez nos sucede eso, no hay vuelta atrás, siempre estaremos a la espera de volverlo a encotrar, cuando veamos las estrellas y sintamos ganas de reír también.
El libro del principito nos deja un claro mensaje:
Lo valioso no son los objetos como tales, son las experiencias, el principito se creía rico con una flor única sin darse cuenta que como esta, existían millones en otro lado sin embargo lo más importante es el tiempo que le hemos dedicado a las cosas, el cariño que le hemos tomado durante mucho tiempo, las experiencias que hemos construido a lo largo de nuestra vida, nos aferramos por lo que se construye, cada pequeña cosa que le damos un valor especial. Muchas veces en nuestra vida nos encontramos con problemas y vamos por la vida buscando amistades o respuestas del porque no pasa, queremos huir para encontrar algo mejor, cuando lo mejor que podemos hacer es aprender, tener esa actitud ante cualquier situación de nuestra vida.
Hemos enterrado nuestro niño que tenemos dentro porque la sociedad lo exige y nos Impide soñar. En la vida podemos encontrar a muchas personas que van por el mundo sin ningún sentido y tratando de ser como tradicionalistas haciendo lo mismo de siempre, debemos vivir de una mejor manera y afrontar los problemas de nuestra vida y tener cada día nuevas metas y propósitos
Análisis Crítico
El Principito
Me preocupare el día que solo pueda ver el dibujo de un sombrero y olvide que es un elefante dentro de una boa, eso significaría que abre perdido lo esencial de la vida todo aquello que es invisible a los ojos y ahí su importancia. El principito es como Sócrates ya que ninguna respuesta sacia sus curiosidades y una de las cosas más importantes que nos ha enseñado el principito es la importancia de soñar no importando que crezcamos, tener ese deseo, ese sueño y potencial para llegar a ser lo que nosotros queramos hasta llegar a imaginar corderos dentro de una caja. La extraña forma en la que los adultos ven la vida y comprenden el amor y la amistad centrándose como ejemplo el interior del piloto ósea el adulto con el fin de provocar la salida al exterior de esas ideas que guardamos por miedo.
Funestamente fantástica esta obra literaria como lo es el principito nos muestra la belleza frente a la burda realidad desde la percepción de un infante.
Análisis Crítico
El Principito
Me preocupare el día que solo pueda ver el dibujo de un sombrero y olvide que es un elefante dentro de una boa, eso significaría que abre perdido lo esencial de la vida todo aquello que es invisible a los ojos y ahí su importancia. El principito es como Sócrates ya que ninguna respuesta sacia sus curiosidades y una de las cosas más importantes que nos ha enseñado el principito es la importancia de soñar no importando que crezcamos, tener ese deseo, ese sueño y potencial para llegar a ser lo que nosotros queramos hasta llegar a imaginar corderos dentro de una caja. La extraña forma en la que los adultos ven la vida y comprenden el amor y la amistad centrándose como ejemplo el interior del piloto ósea el adulto con el fin de provocar la salida al exterior de esas ideas que guardamos por miedo.
Funestamente fantástica esta obra literaria como lo es el principito nos muestra la belleza frente a la burda realidad desde la percepción de un infante.
El Principito
Me preocupare el día que solo pueda ver el dibujo de un sombrero y olvide que es un elefante dentro de una boa, eso significaría que abre perdido lo esencial de la vida todo aquello que es invisible a los ojos y ahí su importancia. El principito es como Sócrates ya que ninguna respuesta sacia sus curiosidades y una de las cosas más importantes que nos ha enseñado el principito es la importancia de soñar no importando que crezcamos, tener ese deseo, ese sueño y potencial para llegar a ser lo que nosotros queramos hasta llegar a imaginar corderos dentro de una caja. La extraña forma en la que los adultos ven la vida y comprenden el amor y la amistad centrándose como ejemplo el interior del piloto ósea el adulto con el fin de provocar la salida al exterior de esas ideas que guardamos por miedo.
Funestamente fantástica esta obra literaria como lo es el principito nos muestra la belleza frente a la burda realidad desde la percepción de un infante.
El libro del principito nos deja un claro mensaje:
Lo valioso no son los objetos como tales, son las experiencias, el principito se creía rico con una flor única sin darse cuenta que como esta, existían millones en otro lado sin embargo lo más importante es el tiempo que le hemos dedicado a las cosas, el cariño que le hemos tomado durante mucho tiempo, las experiencias que hemos construido a lo largo de nuestra vida, nos aferramos por lo que se construye, cada pequeña cosa que le damos un valor especial. Muchas veces en nuestra vida nos encontramos con problemas y vamos por la vida buscando amistades o respuestas del porque no pasa, queremos huir para encontrar algo mejor, cuando lo mejor que podemos hacer es aprender, tener esa actitud ante cualquier situación de nuestra vida.
Hemos enterrado nuestro niño que tenemos dentro porque la sociedad lo exige y nos Impide soñar. En la vida podemos encontrar a muchas personas que van por el mundo sin ningún sentido y tratando de ser como tradicionalistas haciendo lo mismo de siempre, debemos vivir de una mejor manera y afrontar los problemas de nuestra vida y tener cada día nuevas metas y propósitos
cindy aceituno
sección C
Yo creo que es un libro con tramos muy hermosos y que dan guías en la vida, como cuando dice: las personas grandes siempre necesitan explicaciones, porque entiendo se dejan guiar más por la razón que por el corazón, ahí en el sentir no hay tantas preguntas, y como él dice a veces se vive solo sin nadie con quién hablar verdaderamente, es bla bla bla vacío. Frases como” no sabía cómo llegar a él, donde encontrarlo, Es tan misterioso el país de las lágrimas” me encanto. Y bueno hay muchas frases que me gustaron mucho, pero mi da al dar mi opinión acá sino el dar otra mirada y compartirla a ver qué opinan. También considero que es Impresionante sensibilidad la que destila este libro. Lo he leído con los dibujos originales del autor, los cuales subrayan el carácter entrañable de la narración. Me han cautivado los mensajes que un niño procedente de otro planeta ofrece a la humanidad: la importancia de los sentimientos sobre lo material. Y todo ello con ejemplos claros y directos. Una lección de vida en un aparente libro infantil, pero que todo adulto debería leer El Principito consta de unas reflexiones tan profundas que me ha sorprendido.
Por una parte, me ha encantado cómo el escritor ha hecho referencia a cómo los niños pueden tener una mente tan abierta y una extensa imaginación que son capaces de ver e imaginar lo que los adultos no pueden.
Uno de los encuentros del pequeño Principito que más me ha emocionado ha sido el zorro, ya que le enseña lo bonito y emocionante que es la existencia de un amigo en tu vida, pero también lo duro y costoso que puede llegar a ser.
EL PRINCIPOTO.
No puede perder de vista lo esencial; No perder de vista lo esencial". Solo se ve bien con el corazón lo esencial es invisible a los ojos. El libro más que todo es como una guía, que lleva hacia la visión de los niños sobre el mundo. El autor quiere destacar, los problemas que tenemos, aunque el libro se escribió en el 43, hoy en día a un es uno de los libros con más enseñanza para niños, jóvenes y adultos.
Quiere dejar reflejada la soledad, que sentimos en el mundo de hoy, como la falta de amor. El libro del principito es profundamente realista. Quien en verdad sabe imaginar lograra comprender lo que este libro tan maravilloso nos quiere dar a entender, nos enseña cómo no debemos dejarnos deslumbrar x la belleza externa, ni por las palabras si no por los actos.
Nos enseña a ver las cosas desde el punto emocional no de material ni de las apariencias, es decir como las apariencias nos puede llegar a engañar la apariencia de alguien es mucho mejor y como con tan solo una mentira puedes llegar a perder la amistad y la credibilidad y podemos dañar mucho a las personas, todos tenemos responsabilidades que por más insignificantes que sean debemos de ser responsable y tener conciencia de lo que hacemos.
No puede perder de vista lo esencial; No perder de vista lo esencial". Solo se ve bien con el corazón lo esencial es invisible a los ojos. El libro más que todo es como una guía, que lleva hacia la visión de los niños sobre el mundo. El autor quiere destacar, los problemas que tenemos, aunque el libro se escribió en el 43, hoy en día a un es uno de los libros con más enseñanza para niños, jóvenes y adultos.
Quiere dejar reflejada la soledad, que sentimos en el mundo de hoy, como la falta de amor. El libro del principito es profundamente realista. Quien en verdad sabe imaginar lograra comprender lo que este libro tan maravilloso nos quiere dar a entender, nos enseña cómo no debemos dejarnos deslumbrar x la belleza externa, ni por las palabras si no por los actos.
Nos enseña a ver las cosas desde el punto emocional no de material ni de las apariencias, es decir como las apariencias nos puede llegar a engañar la apariencia de alguien es mucho mejor y como con tan solo una mentira puedes llegar a perder la amistad y la credibilidad y podemos dañar mucho a las personas, todos tenemos responsabilidades que por más insignificantes que sean debemos de ser responsable y tener conciencia de lo que hacemos.
grupo#2 sección "c"
El Principito consta de unas reflexiones tan profundas que nos ha sorprendido. Por una parte, me ha encantado cómo el escritor ha hecho referencia a cómo los niños pueden tener una mente tan abierta y una extensa imaginación que son capaces de ver e imaginar lo que los adultos no pueden. Analizo que es un libro que nos habla, como cada uno de nosotros somos príncipes y princesas de nuestras vidas sin tener un trono, sino más bien porque debemos luchar por nuestros sueños hasta alcanzarlos e inspira a todo tipo de personas desde un niño hasta un viejo. Viendo los diferentes puntos de vista de la vida por medio del amor lo veremos de formas diferentes dependiendo la edad que se tenga al leerlo aunque al final siempre nos motivara alcanzar todo aquello de lo que no sabemos que somos capaces de hacer realidad aunque a veces nos será necesario ignorar los prejuicios de las personas que nos rodean o nos conocen, así mismo nos deja muchas enseñanzas de vida tanto a pequeños como a grandes, hace que recordemos nuestros sueños muertos y los retomemos ya que la dirección de nuestra vida únicamente la tenemos nosotros mismos. El libro nos enseña el valor verdadero de la vida, el cual es el amor, algo que con el tiempo le hemos quitado importancia, porque preferimos las cosas materiales, sin razón, sin provecho alguno o que no nos satisfacen y que, a la larga, solo crean un vacío emocional en nuestras vidas. Deberíamos aprender a ser como aquel principito, soñar en grande, disfrutar de cada pequeño detalle de la vida y sobre todo, valorar lo que realmente amamos, Pero al llegar un pensamiento o algo nuevo nos creamos una variación de dudas que no precisamente es para que sean resueltas, sino para no hacer creíble una nueva manera de pensar o algo existente.